Esta semana dedicamos el espacio de la radio para hablar sobre el cambio de hábitos saludables. De lo que acompaña el cambio, cuál es el mejor momento para hacerlos, cómo hacerlos…
El mundo en el que vivimos nos está llevando a un estilo de vida que nos lleva cada vez más a adoptar un estilo de vida que a menudo va en contra de la salud. Tenemos que apostar por hacer un cambio de dirección y promover nuestra salud, que a menudo dejamos en segundo plano. Cuidado, no estamos hablando de dieta, sino de hacer cambios en nuestra vida diaria que nos lleven hacia esta dirección de salud. Este cambio de terminología es importante, porque si nos fijamos, en muchas ocasiones hemos interiorizado el concepto de dieta como negativo, que implica sacrificios, sufrimiento, prohibiciones, hacer cosas que no queremos. Es decir, todo sensaciones negativas. Y precisamente todo lo que lograremos con un cambio de hábitos, que sí, incluye un cambio de dieta, en la forma de comer, será un cambio hacia mejor sin duda alguna.
Debes de informarte bien, coger la responsabilidad de saber qué puedes cambiar y ver que este cambio está en sintonía con el cambio de hábitos saludable, para tener éxito en el cambio. Es decir, fuera el concepto de alimentos prohibidos, de renunciar a lo que te gusta comer, de reducir tu vida social, pero tenemos que buscar y descubrir nuevas alternativas más saludables, como otras formas de cocinar o combinar alimentos y ¿por qué no? buscando o proponiendo otras alternativas más saludables y que quizás no las contemplabas, en el menú del restaurante donde sueles ir o en los lugares donde te reúnes para cenar el fin de semana. Hay más opciones, ¡pero tienes que buscarlas!
El momento ideal para hacerlo, por desgracia no existe, nunca encontrarás el momento perfecto, a menos que ya sea demasiado tarde y ya tengas alguna molestia o realmente el cuerpo ya lo ha cronificado. ¡Así que no esperes más y reacciona! Anticípate a posibles afecciones intestinales, malas digestiones, deposiciones explosivas o períodos de estreñimiento. Así que empieza a escuchar tu cuerpo. ¡Lo leíste bien! El cuerpo nos habla, pero no lo escuchamos, estamos acostumbrados a poner parches a las señales que nos envía. Como es el caso de la digestión, a menudo no prestamos atención a la digestión, sólo cuando tenemos síntomas agudos. Tomar un antiácido o alguna infusión para ayudar a la digestión, en el mejor de los casos, es normal, en lugar de analizar lo que hemos comido e identificar lo que puede habernos sentado mal. Y todo viene desencadenado, en muchos casos, por el estrés al que estamos sometidos día a día, a las preocupaciones del trabajo u otras razones que nos llevan a posponer nuestra salud. Sin darnos cuenta de que, si escucháramos el cuerpo, estaríamos mejor, tanto por dentro como por fuera, y tanto física como mentalmente.
De toda esta teoría, todos somos cada vez más conscientes, pero el problema de muchos es ponerla en práctica. Es hora de poner conciencia, decidir poner fin al descuidarse y abrirse a una era de cambios, pero sin perder la esencia de cada uno, gustos culinarios, disfrutando de la comida, pero sin culpa y sobre todo recuperando la salud. Reeduquemos nuestro paladar a partir de alternativas saludables.
Cuida tu cuerpo, porque es el único lugar que tienes para vivir.
Cuidemos el cuerpo porque necesitamos cuidarnos y amarnos, pero también cuidemos la mente, porque no hay un cuerpo sano sin una mente sana. Y hagámoslo desde la necesidad y desde la responsabilidad de nuestra propia salud. No porque cuidarse sea una moda. Las modas van y vienen, la salud también puede hacerlo, no la dejes ir. Toma consciencia.
Para los motores, priorízate, busca motivaciones que te lleven a adoptar este cambio de hábitos.
Motivaciones reales, vitales, que sean potentes para seguir, porque todo es empezar. Por pequeño que sea el cambio, muy rápido disfrutarás de los beneficios y esto se sumará a la motivación inicial.
Quiero hacer un inciso en esto, y es que el perder peso no tiene que ser una motivación, sino que será una consecuencia de haber implementado algún cambio.
El hecho de poder subir unas escaleras sin ahogarse, ir de excursión y disfrutarlo sin pensar en cuándo llegarás, jugar un partido de fútbol con amigos y poder terminar el partido… Todo esto es una motivación saludable.
Si tienes hijos qué mejor manera de educarlos desde una edad temprana, aunque nunca es demasiado tarde, enseñándoles que debemos dar importancia al estilo de vida que llevamos y que esto debe ir acompañado de salud.
Comencemos con pequeños cambios, no es necesario que, de un día para otro, hagamos cambios radicales si no te ves con fuerza o ganas. Pero sí empieza por hacer alguno. Cambiar la pasta blanca a 100% integral, cambiar de pan blanco a pan 100% y de calidad, reducir la dosis de azúcar por un mayor consumo de fruta, reducir la cantidad de proteína y aumentar la de verduras, … Estos son cambios que puedes empezar a hacer. Poco a poco, sin darte cuenta, se habrán instaurado en tu rutina. De lo que sí te darás cuenta, es de los beneficios que te ha aportado el hacerlos. Mejores digestiones, con más energía, más regularidad en las deposiciones, etc.
¡Consiste en empezar! Pero no lo enfoques como una lucha, porque no lo es, es una transición, un cambio de bando. Concéntrate en ello positivamente, cambia los hábitos que te han llevado a descuidarte y que ahora tú has decidido poner remedio.
Tenemos que ser pacientes, pero con los adultos y con los más pequeños, porque todos los cambios al inicio cuestan, pero cuestan por qué es a lo que estamos acostumbrados, es sacarnos de nuestra zona de confort. Por tanto, hagamos estos cambios con paciencia y respeto, sin forzarlos, todo lo contrario, encontrando las motivaciones de las que hemos hablado e involucrando a los mayores y pequeños de la casa. ¿Con qué cambio podríamos empezar? ¿Decidimos juntos qué hacer? Podríamos decidir cómo comer esas espinacas hervidas que no nos gustan y tal vez probarlas crudas en una ensalada con pipas y salsa de tajine.
No es necesario enmascarar los platos, cremas de mil y un vegetal, para conseguir que los más pequeños, y los adultos, coman variedad de verduras. Es mejor conocer los sabores de las verduras, en sus diferentes elaboraciones, juguemos con las opciones que nos dan los tipos de cocción o crudas o fermentadas.
No necesitas hacer platos espectaculares, de estrella Michelín que nos llevan horas y horas de elaboración, si no quieres hacerlo, busca la simplicidad de los platos, hazlo fácil.
Hoy en día nuestros hijos hacen almuerzos y cenas, que entre los comedores escolares y la implicación que ponen los padres en casa, todavía son lo suficientemente equilibrados, pero tenemos que cuidar de los desayunos y las meriendas. Hoy en día me hago cruces de los azúcares y procesados que se dan en estas comidas. El daño que la industria está haciendo a través de las campañas de marketing y la promoción de calorías vacías, productos muy pobres, nutricionalmente hablando, cada vez se hace más evidente.
Optemos por el pan de calidad, fruta variada y ¿por qué no?, a las sobras de una cena o almuerzo para un desayuno o una merienda. Unos nuggets de coliflor y judías blancas son buenos para la cena y para el desayuno del día siguiente.
La comida de calidad es también un hábito saludable, alimentémonos de alimentos frescos, de temporada, locales y siempre que sea posible, orgánicos. Estamos rodeados de “alimentos” procesados, productos que se comen rápido, “baratos” para el bolsillo, pero no para la salud a largo plazo. No nos dejemos engañar y prestemos atención en lo que compramos.
No podemos pasar por alto el consumo de agua cuando hablamos de hábitos saludables, porque también tenemos la mala costumbre de hidratarnos con bebidas azucaradas cuando hacemos deporte, o zumos artificiales como alternativas en una comida, o bebidas carbonatadas para refrescarnos. No necesitamos todo esto, hidratémonos con agua natural y productos frescos, que tienen mucha agua.
Y no podemos terminar el post de hábitos saludables sin hablar de la importancia de hacer ejercicio físico, tan importante es practicarlo como lo es el comer saludablemente. Movámonos, aunque sea para salir a andar todos los días. El cuerpo y la mente nos lo agradecerán.
En resumen, se trata de tomar las riendas de nuestra salud y decidir iniciar cambios, dar el primer pasito, llevar a cabo los cambios para dar paso a la aparición de los beneficios a corto plazo. Tú lo notarás y tu cuerpo te lo agradecerá.
¡Escucha tu cuerpo y bienvenidos los cambios!
Puedes volver a escuchar el programa en el siguiente enlace:
https://www.novaradiolloret.org/la-llista-el-millor-de-la-setmana-del-2-al-6-de-novembre-2020/
¿Hablamos de hábitos saludables?
Esta semana dedicamos el espacio de la radio para hablar sobre el cambio de hábitos saludables. De lo que acompaña el cambio, cuál es el mejor momento para hacerlos, cómo hacerlos…
El mundo en el que vivimos nos está llevando a un estilo de vida que nos lleva cada vez más a adoptar un estilo de vida que a menudo va en contra de la salud. Tenemos que apostar por hacer un cambio de dirección y promover nuestra salud, que a menudo dejamos en segundo plano. Cuidado, no estamos hablando de dieta, sino de hacer cambios en nuestra vida diaria que nos lleven hacia esta dirección de salud. Este cambio de terminología es importante, porque si nos fijamos, en muchas ocasiones hemos interiorizado el concepto de dieta como negativo, que implica sacrificios, sufrimiento, prohibiciones, hacer cosas que no queremos. Es decir, todo sensaciones negativas. Y precisamente todo lo que lograremos con un cambio de hábitos, que sí, incluye un cambio de dieta, en la forma de comer, será un cambio hacia mejor sin duda alguna.
Debes de informarte bien, coger la responsabilidad de saber qué puedes cambiar y ver que este cambio está en sintonía con el cambio de hábitos saludable, para tener éxito en el cambio. Es decir, fuera el concepto de alimentos prohibidos, de renunciar a lo que te gusta comer, de reducir tu vida social, pero tenemos que buscar y descubrir nuevas alternativas más saludables, como otras formas de cocinar o combinar alimentos y ¿por qué no? buscando o proponiendo otras alternativas más saludables y que quizás no las contemplabas, en el menú del restaurante donde sueles ir o en los lugares donde te reúnes para cenar el fin de semana. Hay más opciones, ¡pero tienes que buscarlas!
El momento ideal para hacerlo, por desgracia no existe, nunca encontrarás el momento perfecto, a menos que ya sea demasiado tarde y ya tengas alguna molestia o realmente el cuerpo ya lo ha cronificado. ¡Así que no esperes más y reacciona! Anticípate a posibles afecciones intestinales, malas digestiones, deposiciones explosivas o períodos de estreñimiento. Así que empieza a escuchar tu cuerpo. ¡Lo leíste bien! El cuerpo nos habla, pero no lo escuchamos, estamos acostumbrados a poner parches a las señales que nos envía. Como es el caso de la digestión, a menudo no prestamos atención a la digestión, sólo cuando tenemos síntomas agudos. Tomar un antiácido o alguna infusión para ayudar a la digestión, en el mejor de los casos, es normal, en lugar de analizar lo que hemos comido e identificar lo que puede habernos sentado mal. Y todo viene desencadenado, en muchos casos, por el estrés al que estamos sometidos día a día, a las preocupaciones del trabajo u otras razones que nos llevan a posponer nuestra salud. Sin darnos cuenta de que, si escucháramos el cuerpo, estaríamos mejor, tanto por dentro como por fuera, y tanto física como mentalmente.
De toda esta teoría, todos somos cada vez más conscientes, pero el problema de muchos es ponerla en práctica. Es hora de poner conciencia, decidir poner fin al descuidarse y abrirse a una era de cambios, pero sin perder la esencia de cada uno, gustos culinarios, disfrutando de la comida, pero sin culpa y sobre todo recuperando la salud. Reeduquemos nuestro paladar a partir de alternativas saludables.
Cuidemos el cuerpo porque necesitamos cuidarnos y amarnos, pero también cuidemos la mente, porque no hay un cuerpo sano sin una mente sana. Y hagámoslo desde la necesidad y desde la responsabilidad de nuestra propia salud. No porque cuidarse sea una moda. Las modas van y vienen, la salud también puede hacerlo, no la dejes ir. Toma consciencia.
Para los motores, priorízate, busca motivaciones que te lleven a adoptar este cambio de hábitos.
Motivaciones reales, vitales, que sean potentes para seguir, porque todo es empezar. Por pequeño que sea el cambio, muy rápido disfrutarás de los beneficios y esto se sumará a la motivación inicial.
Quiero hacer un inciso en esto, y es que el perder peso no tiene que ser una motivación, sino que será una consecuencia de haber implementado algún cambio.
El hecho de poder subir unas escaleras sin ahogarse, ir de excursión y disfrutarlo sin pensar en cuándo llegarás, jugar un partido de fútbol con amigos y poder terminar el partido… Todo esto es una motivación saludable.
Si tienes hijos qué mejor manera de educarlos desde una edad temprana, aunque nunca es demasiado tarde, enseñándoles que debemos dar importancia al estilo de vida que llevamos y que esto debe ir acompañado de salud.
Comencemos con pequeños cambios, no es necesario que, de un día para otro, hagamos cambios radicales si no te ves con fuerza o ganas. Pero sí empieza por hacer alguno. Cambiar la pasta blanca a 100% integral, cambiar de pan blanco a pan 100% y de calidad, reducir la dosis de azúcar por un mayor consumo de fruta, reducir la cantidad de proteína y aumentar la de verduras, … Estos son cambios que puedes empezar a hacer. Poco a poco, sin darte cuenta, se habrán instaurado en tu rutina. De lo que sí te darás cuenta, es de los beneficios que te ha aportado el hacerlos. Mejores digestiones, con más energía, más regularidad en las deposiciones, etc.
Tenemos que ser pacientes, pero con los adultos y con los más pequeños, porque todos los cambios al inicio cuestan, pero cuestan por qué es a lo que estamos acostumbrados, es sacarnos de nuestra zona de confort. Por tanto, hagamos estos cambios con paciencia y respeto, sin forzarlos, todo lo contrario, encontrando las motivaciones de las que hemos hablado e involucrando a los mayores y pequeños de la casa. ¿Con qué cambio podríamos empezar? ¿Decidimos juntos qué hacer? Podríamos decidir cómo comer esas espinacas hervidas que no nos gustan y tal vez probarlas crudas en una ensalada con pipas y salsa de tajine.
No es necesario enmascarar los platos, cremas de mil y un vegetal, para conseguir que los más pequeños, y los adultos, coman variedad de verduras. Es mejor conocer los sabores de las verduras, en sus diferentes elaboraciones, juguemos con las opciones que nos dan los tipos de cocción o crudas o fermentadas.
No necesitas hacer platos espectaculares, de estrella Michelín que nos llevan horas y horas de elaboración, si no quieres hacerlo, busca la simplicidad de los platos, hazlo fácil.
Hoy en día nuestros hijos hacen almuerzos y cenas, que entre los comedores escolares y la implicación que ponen los padres en casa, todavía son lo suficientemente equilibrados, pero tenemos que cuidar de los desayunos y las meriendas. Hoy en día me hago cruces de los azúcares y procesados que se dan en estas comidas. El daño que la industria está haciendo a través de las campañas de marketing y la promoción de calorías vacías, productos muy pobres, nutricionalmente hablando, cada vez se hace más evidente.
La comida de calidad es también un hábito saludable, alimentémonos de alimentos frescos, de temporada, locales y siempre que sea posible, orgánicos. Estamos rodeados de “alimentos” procesados, productos que se comen rápido, “baratos” para el bolsillo, pero no para la salud a largo plazo. No nos dejemos engañar y prestemos atención en lo que compramos.
No podemos pasar por alto el consumo de agua cuando hablamos de hábitos saludables, porque también tenemos la mala costumbre de hidratarnos con bebidas azucaradas cuando hacemos deporte, o zumos artificiales como alternativas en una comida, o bebidas carbonatadas para refrescarnos. No necesitamos todo esto, hidratémonos con agua natural y productos frescos, que tienen mucha agua.
Y no podemos terminar el post de hábitos saludables sin hablar de la importancia de hacer ejercicio físico, tan importante es practicarlo como lo es el comer saludablemente. Movámonos, aunque sea para salir a andar todos los días. El cuerpo y la mente nos lo agradecerán.
En resumen, se trata de tomar las riendas de nuestra salud y decidir iniciar cambios, dar el primer pasito, llevar a cabo los cambios para dar paso a la aparición de los beneficios a corto plazo. Tú lo notarás y tu cuerpo te lo agradecerá.
¡Escucha tu cuerpo y bienvenidos los cambios!
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https://www.novaradiolloret.org/la-llista-el-millor-de-la-setmana-del-2-al-6-de-novembre-2020/
Bienvenido Otoño, bienvenidas castañas, calabazas y boniatos
Con el paso del verano llega el otoño y llegan otros alimentos que nos hacen entrar en calor y nos dan energía, preparándonos para el frío del invierno.
Los paisajes de la naturaleza cambian de tonalidades a colores más cálidos, amarronados, anaranjados y amarillentos, que nos anticipan la caída de las hojas y el crecimiento de fritos y hortalizas del otoño.
LA CASTANYA
Es un fruto seco muy nutritivo que nos aporta hidratos de carbono complejos de larga duración, es decir, energía para calentarnos durante el invierno. También es rica en vitaminas como el ácido fólico, Vit. E y B3, y potasio. Además, es rica en fibra y tiene un bajo contenido en grasas.
El hecho de que sean hidratos complejos quiere decir que se absorben lentamente y progresivamente, de manera que se mantienen los niveles de azúcar equilibrados en sangre y por lo tanto, no generan una bajada de azúcar en picado (como hacen los azúcares simples), que es lo que nos hace venir la sensación de hambre al poco de comer. Las castañas nos aportan combustible de calidad para que el organismo funcione a pleno rendimiento durante horas, sin hacer esta bajada.
El contenido en fibra la hace ser un buen aliado para el tránsito intestinal, pero cuidado si tienes el sistema digestivo comprometido, porque produce flatulencias y mal estar intestinal como efecto secundario.
Por tanto, son una fuente adecuada en situaciones de esfuerzo y no es tan calórica como otras.
Comamos castañas en otoño, en invierno i durante el año, si las encuentras secas o deshidratadas.
Con moderación los diabéticos, ya que son una fuente importante de hidratos, aunque complejos. Y las personas con el aparato digestivo delicado, principalmente por los gases.
Ideas para cocinarlas diferentes a la forma tradicional, asadas en horno, en sartén o en el fuego, tenemos muchas recetas, tanto con la castaña como ingrediente principal o como ingrediente para darle un toque. Una crema de castañas, un guiso con castañas, un salteado de brócoli con castañas trituradas, un flan de castaña…y muchas más versiones.
¿Quieres un truco para reducir los indeseables gases? Pon las castañas en remojo la noche anterior (8h en remojo) y te serán mucho más digestivas.
LA CALABAZA
Es una fruta de otoño y de invierno, de la familia de las cucurbitáceas. Hay muchísimas variedades, de maneras diferentes, alargadas, redondeadas…y de colores que van del blanco al naranja. Tiene un elevado valor nutritivo, rica en vitaminas y minerales, y muchas propiedades. Ayuda a regular los niveles de azúcar en sangre, es buena para la vista, el corazón, previene el cáncer, entre otras.
El comer calabaza nos beneficia por sus propiedades anticancerígenas y antiinflamatorias. Tiene una acción protectora de la próstata y del corazón. Reduce las quemaduras de piel si aplicamos el zumo de la calabaza en la zona afectada. Regula los niveles de azúcar en sangre, por tanto, es apta para los diabéticos. Ayudan a eliminar las lombrices intestinales, sobre todo las pipas de calabaza.
Para comerla podemos escoger entre comerla cruda o cocinada, ya sea al vapor, hervida, salteada, asada, estofada…hay muchísimas pasibilidades y recetas, tanto dulces como saladas.
El inconveniente que tiene es que es difícil de pelar, pero si la escaldas con la piel durante cinco minutos, se acabó el problema. La piel se quita fácilmente sin miedo a cortarte los dedos en el intento de pelarla en crudo.
Siempre es preferible escoger la opción ecológica, de temporada y de proximidad, así nos aseguramos de estar nutriéndonos de todas sus propiedades y en el momento óptimo.
Y con las semillas ¿qué hacemos? Pues las aprovechamos, ya sea cocinándolas con la calabaza o germinándolas para enriquecer nuestras ensaladas o allí donde las pongamos.
¿Te apetece un plato caliente? ¿frío? ¿dulce o salado? Te dejo unas ideas para que vayas abriendo el apetito: estofado de calabaza con setas, ensalada de calabaza asada con granada y vinagreta de cúrcuma, crema de calabaza y almendras, trigo sarraceno con salsa de calabaza y tomate, paté de calabaza, curri de calabaza, espirales de calabaza con espárragos salteados, pastel de calabaza y nueces, muffins de calabaza y chips de choco…
EL BONIATO
Es un tubérculo, a diferencia de la castaña y la calabaza que son frutos. Su color anaranjado lo hace rico en betacarotenos, importantes para la salud visual, pero también podemos encontrar otras especies con tonalidades más blancas, como la conocida patata dulce. Lo encontramos en el otoño hasta inicios del invierno.
Las propiedades que nos aporta el consumo de boniato son depurar el hígado, previene el cáncer, mantiene la piel y la vista saludable y tiene un efecto hidratante.
Para cocinarlo, su gusto dulce nos lleva a comerlo asado al horno, pero la forma de mantener sus propiedades, sobre todo las hidratantes, es cocinarlo al vapor o hervido. Importante saber que, si están mal cocinados o crudos, son indigestos.
Otras formas de comerlos serían en cremas o sopas, chips al horno, hamburguesa de boniato y verduras, “panellets” de boniato, almendra y manzana, boniato relleno de guacamole…
Aprovechemos cualquier ocasión para introducir la calabaza, las castañas y los boniatos en nuestros platos, no solo en la festividad de la Castañada o Halloween y déjate nutrir de sus propiedades.
Si quieres volver a escuchar el programa, te dejo el enlace:
https://www.novaradiolloret.org/la-llista-el-millor-de-la-setmana-del-26-al-30-doctubre-2020/
Hablamos de arroz
Estrenamos temporada hablando de los arroces, normalmente la oferta gastronómica cuando hablamos de arroz es el arroz blanco, es complicado encontrar arroz integral a pesar de que en cartas de restaurantes etiquetados como healthys lo podemos empezar a encontrar.
Es originario de China y es el cereal más consumido después del trigo.
Qué diferencia hay entre el arroz blanco y el integral?
El arroz integral es el que conserva el grano entero, es decir el caparazón original donde se localizan más del doble de las propiedades nutricionales, sobre todo vitaminas del grupo B, minerales como el potasio, fósforo, magnesio y fibra. La fibra, además de saciar, es esencial para regenerar y mantener la flora intestinal. También encontramos grasas saludables y nos aporta hidratos de carbono complejos, que proporcionan glucosa de liberación lenta al organismo, y son una gran fuente de energía durante horas de manera continuada.
El arroz blanco en cambio ha sido refinado, tratado y por tanto ha perdido el 10% de las proteínas, 84% de las grasas saludables, 70% de sales minerales, y buena parte de vitaminas del complejo B.
Como consecuencia, el índice glucémico del arroz blanco es de 70, mientras que el del arroz integral es de 50.
Por este motivo, es más interesante el integral porque por el hecho de tener más fibra hará que la liberación de glucosa en sangre sea de forma progresiva, es decir, el pico de glucosa en sangre después de comer el integral, será menos pronunciado que el que nos produce el blanco. Este es el motivo por el cual se indica el consumo del integral frente al blanco, sobre todo en los diabéticos. No es el caso de las personas que cursan con alguna patología que les afecte la fibra, en estos casos estaría contraindicado.
¿Sabías que existen más de 40.000 tipos de arroces en todo el mundo? y es que el arroz es una muy buena fuente de energía, rico en sodio, bajo en grasa y refuerzan nuestro sistema inmunitario.
Podemos clasificar los arroces según la forma; el color; aroma o textura; el procesado:
Según la forma se distinguen entre:
Según el Color, Aroma y Textura diferenciamos entre:
Según el tipo de Procesado, diferenciamos entre::
Mencionamos aquí el conocido arroz Salvaje, puesto que en realidad no es un arroz, viene de una planta similar a la del arroz. Normalmente lo encontramos mezclado con otros tipos de arroz y como acompañamiento de otros platos.
Por tanto, al escoger el tipo de arroz que utilizaremos, tendremos en cuenta estos tips, en función de la receta que cocinemos. Siempre seguiremos las instrucciones, el tiempo de remojo y el tiempo de cocción que nos especifique el paquete de arroz.
Como todo, depende de la cantidad y de la calidad del cereal. Ya hemos visto que a nivel nutricional es mucho más interesante el arroz integral. I referente a la cantidad hemos de recordar que lo que tiene que en nuestros platos son frutas y verduras. Los hidratos, en este caso el arroz, proporcionalmente deberían de ocupar ¼ del plato, si hablamos de un adulto, i un poco menos de 2/4 del plato, si hablamos de un adolescente.
Pues claro que sí, aquí os dejo una receta.
Arroz con leche
Ingredientes para 3-4 raciones
Ya tienes el arroz con leche sólo hace falta probarlo. Si lo prefieres fresquito o para conservarlo, dejar en la nevera. Te aguantará una semana refrigerado. Cuando lo pruebes, seguro que no dejarás que dure tanto en la nevera.
Es un compuesto que lo encontramos presiente al medio ambiente tanto por procesos naturales, como por el uso de herbicidas y pesticidas, entre otros procesos industriales. Todo ello contribuye a la cantidad que encontramos en las diferentes zonas de cultivo de todo el mundo. Pero a elevadas dosis puede tener efectos carcinogénicos si se llegara a tener concentraciones elevadas en el cuerpo, fruto de consumir arsénico a dosis altas y durante largo periodo de tiempo.
El arroz por sus características y forma de cultivar (campos inundados), absorbe 10 veces más arsénico que otros tipos de cereales. Pero a nivel de Europa, hay establecidos unos límites máximos de arsénico en los arroces y en sus derivados. Por lo tanto, el arroz y derivados que compramos en los súper españoles son seguros gracias a los controles de las Autoridades Sanitarias.
De todos modos, si quieres reducir la cantidad, te dejo una serie de tips bien sencillos:
Recuerda, los productos que tienen más arsénico son las tortitas de arroz y las bebidas de arroz. Por este motivo, los más pequeños no tienen que abusar.
Puedes volver a escuchar el programa en el siguiente enlace: https://www.novaradiolloret.org/la-llista-el-millor-de-la-setmana-del-19-al-23-doctubre-2020/
Vinagreta de cúrcuma
Para acompañar las infinitas ensaladas del verano os propongo una vinagreta bien diferente para darle sabor y color a vuestros platos.
Ingredientes:
Procedimento:
Disponer todos los ingredientes en el vaso del túrmix y triturar.
Podemos conservar la vinagreta en la nevera dentro de un bote hermético unos 3-4 días.
La cúrcuma tiene propiedades antioxidantes y es un reconocido antiinflamatorio.
Con el fin de augmentar la biodisponibilidad, se aconseja combinar la cúrcuma con pimienta negra, la cual cosa efectivamente mejora la absorción y el efecto.
Se aconseja que se tome cúrcuma en un menú en el que también encontremos cebolla, sésamo, manzana, pomelo o ajo ya que se absorberá mejor y se eliminara más lentamente.
Mi propuesta como base a esta vinagreta de cúrcuma es esta ensalada de quinoa con canónigos, tomates cherrys, avellanas picadas y sésamo.
Dejemos volar la imaginación en la cocina.
Los alimentos fermentados, la revolución de los bacterios
Como cada lunes, un nuevo programa de alimentación en la Llista de @novaradiolloret , hoy hemos hablado de alimentos fermentados?. ¿Porqué están de moda? ¿Qué beneficios nos aportan?
Estos alimentos vivos están llenos de prebióticos que nos ayudan a disfrutar de una flora bacteriana llena de vida y asimilar los nutrientes de los alimentos que consumimos.
El chucrut, kimchi, pickles, miso, kombucha… son algunos de los alimentos que te contaré hoy.
¡Si quieres saber más, escúchame aquí!
Verdura para los pequeños
Hoy en la Llista de @novaradiolloret hemos hablado de verduras???.
Igual es el alimento que nos cuesta más que coman los peques de casa???, si tenemos en cuenta el plato saludable, la mitad del plato ya sea en la comida o en la cena, debe estar compuesto de verduras. Así que hoy vamos a darte ideas para hacer más atractivas las verduras y que predominen en tu plato. Recuerda que es muy importante predicar con el ejemplo e inculcar una buena nutrición infantil. Involúcralos en la cocina????.
¿Y si mi hijo no quiere comer animales?
Hoy en el programa de La Llista de Nova Radio Lloret hemos hablado del vegetarianismo. ¿En que se basa este tipo de alimentación, es apta para todas las edades, hace falta suplementar? ???☀️ ¿Y si mi hijo no quiere comer animales??
A veces nos encontramos con familias que los progenitores son vegetarianos y ya educan a sus hijos con esta alimentación. Pero existen otras familias que no son vegetarianos, pero puede haber algún hijo que no quiera comer animales, y como padres creemos que debemos insistir en que es importante la carne y la verdura ?? pero, ¿es realmente así?
Cuando nos encontramos con esta situación, yo aconsejo hablar con el niño y preguntar los motivos por los que no quiere comer carne o pescado y debemos respetarlo.
Como padres podéis asesoraros con un nutricionista especializado, i si seguís esas pautas del profesional, teniendo en cuenta el plato saludable @tumenusaludable y suplementarse con B12, es correcta la alimentación equilibrada y optima para el desarrollo del niño.
Escúchame aquí y resuelve tus dudas.
¿Son saludables las galletas?
Popularmente tienen una inmerecida fama de saludables que la diferencia de otras piezas de bollería, pero sustancialmente son lo mismo??.
Suele ser una pregunta muy frecuente a la consulta, ¿hay en el supermercado galletas saludables??
Te daré algunos consejos para que lo descubras tu mismo.
Los más importante es leer la lista de ingredientes?️♀️, no nos quedemos sólo con la parte de delante del paquete, ya que verás que no todo lo que pone es verdad. Así que nos debemos fijar si contienen o no estos ingredientes:
Si contienen estos ya estaríamos hablando de un procesado no saludable.
Y otro aspecto que debemos observar es la sal, aunque parece lo contrario, muchos de estos productos contienen cantidades altas.
Deberíamos mirar que de cada 100g:
Valorando todas estas indicaciones, puedes extraer vuestras conclusiones. No sé si te has fijado, pero cuando un alimento es para público infantil, contiene más azúcar. Así que voy a regalarte una reflexión: deberían estar las galletas en los desayunos recomendados como saludable en las escuelas?
Comer fuera de casa, pero saludable
¿Eres de los que no puede comer en casa ?♂️ porque vas a un restaurante o con tupper? ? Hoy en el programa La Llista de @novaradiolloret consejos para comer fuera de casa de manera saludable.
Los trucos son:
¿Y tú, qué has comido hoy?? De las sobras también podemos crear un plato nuevo, original y completo.
Sobre la celiaquia
¿Cómo empiezas la semana?
Con ilusión, con nuevos retos, con alegría, con energía…☀️?️
Una buena manera es empezar con @ambnutricio y con @novaradiolloret dónde cada lunes a las 10h, hablamos de nutrición infantil y alimentación. Hoy hablamos sobre celiaquía.